(4) aceptar lo negativo

Para nuestro bienestar es muy conveniente que aprendamos a aceptar lo que no se puede cambiar, reconociendo la realidad tal como es y que al menos de forma inmediata no la podemos controlar o que ya ha sucedido algo y por tanto ya nunca se podrá cambiar, así como que aprendamos a tolerar la frustración que ello genera. No nos queda más remedio. ¿Acaso podemos hacer algo más que sea útil?

Para desarrollar la capacidad de aceptación nos puede ayudar mucho cultivar el entrenamiento de la conciencia. También nos conviene pensar en la aceptación y reducir nuestra necesidad de control.