Prosperidad

La segunda necesidad general es la prosperidad. Esta necesidad nos permite sobrevivir a nosotros y a los seres que están a nuestro cargo y suele influir positivamente en nuestro bienestar. Somos prósperos si tenemos lo necesario para poder vivir: comida, bebida, abrigo, un refugio donde resguardarnos. Si disfrutamos de la inmensa suerte de tener nuestras necesidades básicas cubiertas, nos conviene sentirnos agradecidos por ello. Si no tenemos acceso a dichas necesidades básicas, podemos mejorar nuestra prosperidad desarrollando el espíritu de trabajo, de ahorro y de inversión, de progreso, de aprendizaje y mejora continuados y de innovación el espíritu de trabajo, de ahorro y de inversión, de progreso, de aprendizaje y mejora continuados y de innovación. Una vez tenemos nuestras necesidades básicas cubiertas, el aumento de nuestra prosperidad no suele suponer un aumento significativo de nuestro bienestar.

Para progresar en nuestra carrera profesional nos puede ser de utilidad el coaching profesional y el career conseling.

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