Odio

Una emoción especialmente desagradable tanto para nosotros como para aquellos a quienes les afecta es el odio, que incluye la antipatía, el rechazo, la enemistad o la repulsión hacia una persona, grupo de personas, organización, animal, idea, cosa, situación o fenómeno, así como el deseo de evitar, limitar o destruir aquello que se odia.

Para gestionar esta emoción podemos hacer lo siguiente:

– Cuestionar creencias irracionales sobre lo que es nocivo, dañino y “malo” (ver gestión de pensamientos desagradables).

– Soltar: si miramos el odio de frente, observándolo como hacemos con la meditación (ver conciencia no focalizada), tiende a desvanecerse.

Temas relacionados