Por sensación de soledad entendemos un estado emocional que se produce al percibir la falta de relaciones sociales y de vínculos profundos con otras personas. La soledad puede ser social, que consiste en no tener una red de contactos a la que dirigirse y de la cual sentirse parte integrante; y emocional, cuando sí se dispone de ésta, pero no se establecen uniones profundas, lo que se conoce habitualmente como “estar rodeado de muchas personas y sentirse solo”. En la soledad se incluye la sensación de no ser amado, que es la interpretación subjetiva que hacemos del comportamiento de los demás hacia nosotros.
Una persona puede estar aislado o incluso sentirse sola y al mismo tiempo ser feliz, pero frecuentemente la soledad es desagradable, pudiéndose generar una sensación de aislamiento, de vacío,malestar, fuertes sentimientos deculpa, bajaautoestima, desesperanza hacia el futuro, ansiedad y sistema inmunológico más débil.
Soluciones
(1) Cambiar el estilo de vida. El cambio sólo podemos producirlo nosotros mismos. Nos relacionaremos más con los demás si encontramos las ocasiones para ello: apuntarse a alguna actividad que nos permita conocer gente, aprovechar para intercambiar conversaciones con personas que nos son próximas y volver a ponernos en contacto con amigos y familiares a los que hace tiempo que no vemos pueden ser buenas ocasiones para intercambios agradables, que enriquecen a ambas partes.
(4) La soledad también puede ser positiva cuando aprendemos a convivir con ella de forma saludable. Nos puede aportar espacio para nosotros mismos y para actividades que queramos desarrollar. Por ejemplo, podemos empezar un hobby, implicarnos en algún trabajo o disfrutar de pequeños placeres como la contemplación de un paisaje o de una buena película.